La personalización de vehículos es una de las industrias de mayor crecimiento mundial. Algunos lo consideran el más novedoso arte creado por el hombre.
La pasión por modificar un auto, tanto por sus características mecánicas como su apariencia exterior con el propósito de alcanzar un estilo único, empieza a tomar un rol protagónico en la “cultura urbana” actual.
En la actualidad, el arte de la modificación automotriz está creciendo exponencialmente y casi en cada población mundial, por pequeña que sea, incluye en su calendario de ferias y fiestas un par de fechas para organizar una concentración y exponer esta práctica en su estado puro, que evoluciona como una moda y un estilo.
La fiebre por los autos modificados tuvo su origen en Estados Unidos en la década de los años 40 con la aparición del Hot Rod. Las primeras máquinas alteradas aparecieron con el propósito original de presentarlas en pruebas de aceleración clandestinas. Al principio fue un pasatiempo de los sectores menos pudientes, pero luego, ya en los años 50, pasó a ser una diversión de masas, con la legalización de las carreras y la reglamentación en la construcción de estos autos. Además de potenciar las máquinas, la gente buscaba personalizarlos: aparecen los aros de aceleración, los adornos cromados, los frenos de disco y la pintura metalizada.
Con ustedes..., el tunning...
Durante años, la pasión por la “Biela Incandescente” se mantuvo viva e, incluso, distintos fabricantes formaron parte activa en los diseños de los automóviles. Sin embargo, la evolución de la tendencia dio paso para que el Tunning tomara la escena. Las marcas se involucraron en la moda, entrando a los departamentos de diseño y desarrollo a pilotos e ingenieros especialistas. Además, se ampliaron las áreas de modificación, pues elementos como el sistema de audio, el motor, el interior, las ruedas y el ajuste de suspensión fueron incluidos.
El "Boom"
Este fenómeno se ha expandido enormemente, especialmente entre los jóvenes. Hoy en día hay una gran cantidad de concentraciones de fanáticos, prensa especializada, tiendas de accesorios y eventos. Los medios, especialmente la televisión, han influido considerablemente -con programas y videos musicales- en la aceptación del tuneo como moda y estilo de vida. El cine también motivó a muchas personas, especialmente a jóvenes, a partir de películas como The Fast and the Furious. Incluso, también video juegos como Need for Speed han impulsado esta tendencia que, cada vez más, suma adeptos en el mundo. “Las nuevas tendencias apuntan a crear autos que estén dentro de los límites legales para andar por las calles, pero también personalizados y que sean fieles a sus bases, mejorando el manejo, la dirección y la capacidad de frenada del vehículo de serie”, llegó a declarar Michizo Nikura, creador de Mine’s, una reconocida firma de tunning japonesa.
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